En el día de ayer asumió formalmente el Dr. Mario Russo como titular de la cartera sanitaria nacional.

La creación del Ministerio de Salud representa un cambio en los planes originales de Milei, quien inicialmente buscaba asignarlo rango de Secretaría bajo el ministerio de Capital Humano. Esta decisión generó críticas, llevando a la decisión de último momento de asignarle rango de Ministerio.

De acuerdo al nuevo plan de gobierno para el ámbito de la salud, Russo deberá liderar un cambio de perspectiva en el servicio público de la salud. Esto se debe principalmente a que el nuevo gobierno de la República Argentina busca transicionar hacia un sistema donde el Estado financie la demanda y no la oferta, lo que permita a los financiadores competir por brindar un mejor servicio a sus afiliados.

La falta de insumos críticos, los reclamos salariales del personal de salud, el atraso en el precio de las cuotas de las prepagas y obras
sociales, son las consecuencias de un sistema atravesado por altos niveles de inflación y poca disponibilidad de reservas.

En este marco, el Ministro de Salud deberá enfrentar desafíos, según marcan especialistas en el área como:

-Trabajar en mayor integración del sistema de salud, tanto en los distintos niveles de gobierno (local, provincial, nacional) como en los sectores público, privado y de la seguridad social.

-Impulsar el incremento de la digitalización del sistema, de manera que permita la interoperabilidad de las historias clínicas.

-Fomentar la formación de profesionales en el ámbito de la salud, para lograr cubrir vacantes de especialidades críticas.

-Permitir el acceso a mayores niveles de innovación en los tratamientos, de manera tal que permita al sistema ahorrar en el largo plazo.

-Unificar la financiación de las prestaciones y evitar la duplicidad del sujeto financiador.

-Elaborar políticas públicas de salud en un sistema atravesado por altos niveles de inflación, que tiene como consecuencia la pérdida del valor del aporte que realizan los trabajadores a sus obras sociales.

-La progresiva adaptación a la transición demográfica, en la cual las enfermedades crónicas y la salud mental son un desafío en sí mismo respecto a su financiación.