Cáncer de cuello de útero: en 2022 se reportaron casi 350.000 muertes en el mundo

Desde 2020, cada 17 de
noviembre se celebra el Día de Acción
para la Eliminación del Cáncer Cervicouterino
, una estrategia global
promovida por la Organización Mundial de
la Salud
que tiene como objetivo concientizar sobre la prevención y
tratamiento de este problema de salud pública.

El cáncer de cuello uterino es el cuarto tipo de cáncer
más común entre mujeres a nivel mundial, con aproximadamente 660.000 nuevos
casos y 350.000 muertes en 2022. América Latina y el Caribe presentan altas
tasas de incidencia y mortalidad, reflejando desigualdades en el acceso a los
servicios de salud.1

En Argentina ocupa el tercer lugar entre los canceres más frecuentes en mujeres y reporta una incidencia alarmante[VV1] , con más de 4.600 diagnósticos nuevos anuales y más de 2.500 muertes.[

La principal causa de este tipo de cáncer es la infección persistente por el Virus de Papiloma Humano (VPH), una familia de virus que puede afectar a todas las personas. Se estima que existen alrededor de cien tipos, de los cuales cuarenta afectan la zona genital y anal.

Se clasifican en dos grandes grupos, uno de bajo riesgo oncogénico y otro de alto riesgo oncogénico, que puede provocar ciertos tipos de cáncer. 

Los enfoques integrales de prevención primaria (vacunación contra el VPH) y prevención secundaria (tamizaje) y prevención terciaria (tratamiento adecuado y oportuno de lesiones precancerosas) evitarán la mayor parte de los casos de cáncer cervicouterino.6

Con ese objetivo, la Organización Mundial de la Salud ha propuesto una estrategia global que tiene como fin alcanzar la eliminación del cáncer de cuello uterino. . Con vistas a 2030, apunta a que los países adheridos a la iniciativa alcancen las metas 90-70-90, que implica lograr una cobertura del 90% de la vacunación contra el VPH en niñas antes de los 15 años, tener una cobertura del 70% en la detección temprana mediante estudios citológicos -es decir, que mujeres sean examinadas con una prueba de alta precisión antes de los 35 y a los 45 años- y llevar adelante el 90% de tratamiento de lesiones precancerosas.

“Concientizar sobre el VPH y el
cáncer de cuello uterino es crucial para prevenir esta enfermedad. Informar y
proveer recursos educativos y herramientas, a mujeres y hombres, para que
puedan priorizar la salud, debe ser una tarea colectiva”
, afirma Virginia
Verdaguer, directora médica de MSD Argentina.

En tanto, según plantea la OMS, además de las pruebas específicas para la detección precoz de lesiones, es fundamental que exista acceso a un tratamiento adecuado y oportuno para las todas las personas que enfrentan un diagnóstico de cáncer.[

Casi todos los casos de cáncer cervicouterino (99%) están vinculados con la infección persistente causada por los Virus del Papiloma Humano[NB3]  (VPH) de alto riesgo. La infección por estos virus es muy común y de fácil transmisión a través del contacto íntimo con piel y mucosas que se produce durante cualquier tipo de contacto sexual.

El éxito de esta iniciativa para eliminar el cáncer del
cuello de útero requiere del compromiso de toda la sociedad, los gobiernos y
las instituciones. Asegurar el acceso a la vacunación, la detección precoz y el
 tratamiento oportuno, es el desafío.